martes, 9 de diciembre de 2014

Críticas: Soen, Machine Head, Circa Survive y Antemasque.

Soen - Tellurian

9'5/10


Lo más importante cuando hablamos de Soen, es la vuelta a la música y la recuperación completa de uno de los mejores baterías en activo. Capaz de pasar de ritmos suaves a fuertes dominados con el doble pedal de manera brillante, Martín López ha alegrado a todos los que le conocen desde sus andaduras con Amon Amarth.
Recordemos que, el sueco, de origen uruguayo, estuvo apartado un tiempo de la música, ya que en una gira con Opeth, sufrió varios ataques de pánico, y además se le fue detectado un envenenamiento en la sangre, derivado de una extraña enfermedad, y tuvo que abandonar la banda en 2006. Todo era negro por entonces, y por fin, está recuperado, y dispuesto a hacer lo que más le gusta, que es la música.
En el año de su formación, Soen contaba con el bajista Steve DiGiorgio (ex Testament y Sadus, entre otras), el vocalista Joel Ekelöf, el guitarrista Kim Platbarzdis, y el mencionado López.
En su álbum debut, publicado en el año 2012, bajo el título de 'Cognitive', observamos unos Soen que tenían muy marcadas sus influencias de bandas progresivas, en especial, de Tool.
Tras la publicación de este disco, no muy bien recibido por la crítica, que les recriminaba su parecido con el 'Lateralus' de los ya citados Tool, DiGiorgio, abandonó la formación, y fue sustituido por Stefan Stenberg. Fue aquí, donde la banda escogió seguir otro camino a la hora de componer y preparar un nuevo disco. Dos años después de 'Cognitive' nos presentan 'Tellurian', un álbum que ya empieza brillante, con una portada que llama la atención a cualquiera.
En 'Tellurian', observamos una banda que ha madurado en sus sonidos, que ha trabajado hasta el más mínimo detalle en las composiciones y en la producción del álbum. Soen ha sido capaz de juntar todas sus influencias y modelarlas a su antojo, creando un sonido más personal. La delicadeza con la que han compuesto este álbum se observa en canciones como 'Kuraman' o la magistral 'The Words', seis minutos de delicia musical. 
Sigue sonando similar a sus influencias, como en 'Tabula Rasa' en la que el bajo y batería inevitablemente recuerdan a Tool, aunque en este disco, también es notable la influencia de Opeth, sobre todo de su penúltimo trabajo, 'Heritage', por la cantidad de cortes progresivos.
Brillante el trabajo vocal de Joel Ekelöf, acompañado de coros en todas las baladas y estribillos de cada canción, que, desde lo más profundo de su melancolía, nos hace llegar a lo más alto de la montaña rusa, sin sentir miedo ni vértigo, protegidos por su endulzada voz. Brillante Ekelöf.
Sin ninguna duda, 'Tellurian' estará entre lo más destacado de este 2014, y lo recomiendo a todas aquellas personas que disfruten con bandas como Opeth o Leprous.

                                                                                      Eduardo López de Ayala Alcántara








Machine Head - Bloodstone and Diamonds

7'9/10



Veinte años. Sí, esa es la edad de este leviathan de la música pesada. Soy de la opinión de que Machine Head existen por mandato divino, pero además, es que de no hacerlo, habría que crearla.
Que hayan pasado veinte años desde aquel 'Burn My Eyes' que revolucionó los cimientos del metal y sigan creando una expectación desmedida con cada nuevo lanzamiento es algo digno de mención. Y después de 3 años de gira mundial presentando su anterior obta, 'The Locust', el próximo trabajo se esperaba como agua de Mayo.
Lo primero que se aprecia en este nuevo trabajo es una continuidad en la idea musical que llevan desarrollando desde 'Through The Ashes Of Empire', obra que inició un giro fundamental en la banda, apartándose de los giros decadentes en los que estaba el nu-metal a principios de milenio y que culminó en el mejor disco de metal de lo que llevamos de siglo, el glorioso 'The Blackening'.

Este 'Bloodstone & Diamonds' recoge el testigo de su anterior obra, composiciones densas, con un aire de barroquismo que ya es santo y seña de la banda, aderezado todo con unos estribillos que con las escuchas van ganando terreno  presencia, y culminando con unos punteos de guitarra que hacen levantarte del asiento. Mención especial al trabajo vocal de Robb Flynn, posiblemente en el mejor momento de su carrera, que sin ser precisamente un virtuoso es capaz de ponerte los pelos de punta con esa garganta rasgada y su presencia escénica.
El disco requiere de varias escuchas, no es para nada inmediato, debido posiblemente, a que se les ha ido la mano con el minutaje. Esto hace que al final de la escucha quede una sensación agridulce, y es que el final del disco se hace algo pesado al incluir algún interludio en las canciones que alarga el LP en exceso. Si hubieran intentado concretar algo más, dejando tal vez un disco de 50 minutos en vez de 70, estaríamos hablando de otra obra redonda, en vez de tener la sensación que se han ido por las ramas.
En definitiva, otro trabajo con el que disfrutar, saltar y alabar escucha tras escucha. Muy recomendable para los amantes del género, puede que más lejano para aquellos que se acerquen por primera vez a Robb Flynn y su séquito.

                                                                                   Gonzalo López de Ayala Alcántara








Circa Survive - Descensus

6'5/10



Circa Survive es esa banda liderada por el flamante vocalista Anthony Green, quien con este nuevo lanzamiento junto a la formación de Filadelfia, ya lleva quince álbumes de estudio entre todos sus proyectos. El cantante, está en un momento brillante de su carrera, y en esta ocasión, bajo el sello de Summerian Records, junto a Circa Survive, 'Descensus', quinto álbum de la banda.
Tenía muchas ganas de este disco. Tras lo bueno que me pareció el anterior trabajo, 'Violent Waves', publicado en el 2012, esperaba mucho de los de Anthony Green y compañía, y más aún después del pequeño adelanto que dieron de 'Schema', y tras la publicación de la portada del disco. Me moría de ganas.
Me he escuchado este disco las suficientes veces como para poder opinar sobre él, y es que, en todas las escuchas seguí pensando lo mismo que en la primera: la monotonía estropea el disco.
Tras un inicio caótico con 'Schema', seguido de la progresiva 'Child Of Desert' y la rockera 'Always Begin', el disco entra en una dinámica, en la que todas las canciones parecen ser la misma. Es decir, que comienza con fuerza, y conforme avanza, se va desvaneciendo, entrando en esa monotonía, y quizás, aburrimiento.
De una cosa no hay duda, y es que en cuanto  al trabajo vocal de Anthony Green, rompiéndose las cuerdas vocales en más de una ocasión, como en 'Only The Sun' o la mencionada 'Always Begin', no hay queja.
'Descensus' requiere paciencia. No es el mejor álbum de la banda, y tampoco es un álbum con el que vayas a disfrutar bailando en tu cuarto, pero si tiene una calidad más profunda, que se observa con cascos y los ojos cerrados.
Encontrarás una mezcla de sonidos, trabajados desde el álbum debut 'Juturna', allá por 2005, con las producciones más recientes tanto de Circa Survive, como los proyectos paralelos de Anthony Green. Hablo de que, incluso sonidos pertenecientes a la escena post-rock se pueden apreciar en alguna canción, como es 'Who Will Lie With Me Now' o 'Nesting Dolls'. Y es que juntar post-rock, con rock progresivo y post-hardcore, no es tan fácil. Es lo que más valoro de este nuevo disco. Y es que, hay que saber valorar lo que es un LP, y todo lo que hay en él.
Da la sensación, que en este álbum la banda sigue sin encontrar un sonido propio.
Y sigo pensando lo mismo, aún les falta ese disco que les empuje hacia lo más alto. Poco les falta, estoy seguro.

                                                                                    Eduardo López de Ayala Alcántara










Antemasque - Antemasque

8,8/10



Cuando Cedric Bixler-Zavala publicaba en Twitter, que The Mars Volta se separaban, culpando a su compañero Omar Rodríguez-López, todos nos echamos las manos a la cabeza. Se separaban dos genios, que hicieron auténticas maravillas musicales tanto con At The Drive-In, con de The Mars Volta, y con multitud de bandas con las que colaboraron y produjeron.  
No pasaron ni 6 meses cuando ambos daban la noticia de que formarían un nuevo grupo. Personalmente, cuando estas cosas pasan, creo que ciertas personas aunque no quieran, están predestinadas a estar juntas. Ambos músicos, contaron con la ayuda de Dave Elitch, quien fuera batería en The Mars Volta, y Flea, bajista de los Red Hot Chilli Peppers, que ya trabajó con ellos en The Mars Volta, además de dejarles su estudio de grabación.
Parece que el álbum homónimo de Antemasuqe salió hace un siglo, ya que el proyecto se oficializó el 9 de abril, junto a dos singles, '4 AM' y 'In The Lurch', pero es que fue hace un mes solamente cuando salió de manera oficial a la venta la edición física del disco.
La primera vez que escuché este disco, esperando algo similar a lo último de The Mars Volta, quedé asombrado. Parece que ambos, para intentar buscar un punto en común a la hora de encontrar un sonido, decidieron volver a aquellos At The Drive-In, o al 'Deloused In The Comatorium' de The Mars Volta. 
Directo, sencillo y rápido, así definiría este álbum. Con un inicio brutal con '4 AM', seguida de 'I Got No Remorse', con unos riffs que nos recuerdan a los mismísimos Rage Against The Machine, y 'Ride Like The Devil's Son', y el 'hitazo' 'In The Lurch', que entre los coros, la guitarra de Omar y la voz de Cedric, nos hacen recordar a los The Mars Volta que echábamos de menos. Estas cuatro canciones, uno de los mejores inicios de este año, del anterior y del que viene. 
Sin emabrgo, comienza en este momento, con dos canciones más 'poperas', como son '50,000 kilowatts' y 'Momento Mori'.
'Drown All Your Witches', quizás sea la más rechazada por los que estaban disfrutando de temas más 'punkarras', ya que, en esta ocasión se decantan más por una canción suave con guitarra acústica, en la que, acompañado de unos coros en el estribillo, te termina por convencer: 'joder, es que son unos genios'.
'Providence', es más similar al sonido que presenta el proyecto paralelo de Omar Rodríguez, Bosnian Rainbows, por el uso de esos sintetizadores de fondo, que también recuerdan al que en mi opinión, marcó el fin de The Mars Volta, su último álbum, 'Noctourniquet'.
Las dos últimas canciones, son las que menos te enganchan, y ponen fin a un disco que no consigue la perfección, sencillamente, por estas dos canciones, que en lo personal, no me terminan de convencer.
Bienvenidos a otro experimento del laboratorio del doctor Cedric y el doctor Omar.
Genios.

                                                                                    Eduardo López de Ayala Alcántara

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